La estabilidad inherente del PV1D significa que siempre se le puede forzar un poco más. El montaje simétrico de sus bocinas gemelas mantiene el subwoofer perfectamente equilibrado y anclado al suelo. Por lo tanto, cuando retumba no hay vibraciones. Además, la especial disposición de los transductores –“espalda contra espalda”- también permite mejorar adicionalmente la distribución de la presión en el interior del recinto. Combinados con un amplificador de última generación que suministra una potencia de 400 vatios continuos, dichos transductores exhiben la dinámica y el control necesarios para proporcionar todo lo que se le pueda pedir a un subwoofer. Un sonido grandioso a partir de una pequeña burbuja.
1 Subwoofer PV1D - 1 Manual de usuario